La Verdad, Alicante, 20.04.2011

La Fiscalía no recurrirá la absolución de los doce miembros de la Congregación del Olivo, con sede en Ondara, pese a que pidió tras el juicio para algunos de ellos penas que superaban los veinte años de prisión por considerarlos partícipes de una «secta destructiva» que causó lesiones psicológicas a una decena de adeptos.

La Audiencia absolvió hace unos días a los primeros miembros de un grupo religioso que estaban acusados por el Ministerio Público de constituir una secta destructiva. Según el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia, los adeptos de la Congregación del Olivo, fundada en 1993 y que evolucionó desde la fe evangélica al judaísmo, «asumieron voluntariamente la forma de vida preconizada por la misma, afín con las creencias que libremente eligieron profesar, sin que, en ningún caso, fueran víctimas de tratos degradantes e inhumanos, ni de técnicas de adoctrinamiento tendentes a la manipulación y despersonalización».

Unos peritos designados por el juez instructor de Dénia diagnosticaron en las supuestas víctimas problemas psicológicos que iban desde desorientación o dificultades para concentrarse hasta trastornos de sueño, depresión o ansiedad. Además, un informe de la Guardia Civil apuntaba a que Yehudah había obtenido en menos de cinco años 265.746 euros procedentes de las aportaciones en forma de «diezmo» de los feligreses, por lo que había sido acusado de estafa.

La sentencia, que sienta un precedente porque es la primera sobre un grupo religioso de estas características, rechaza todas las acusaciones. No aprecia ilegalidad alguna en los hechos objeto de enjuiciamiento, aunque será el Tribunal Supremo quien tenga la última palabra.