El Intransigente Digital (Argentina), 21.11.2012
Desde la Comisaría de la Mujer de Tornquist , y a través de su abogado, Estefanía Heit, la periodista que junto a su marido,Jesús Olivera, mantuvo cautiva durante tres meses a Sonia Molina, aseguró que “no pertenece a ninguna secta” y al mismo tiempo negó que la víctima haya sufrido padecimientos en su domicilio, sino que llegó en grave estado hasta su vivienda.“De lo único que estuve mal o me reprocho es de no haberla llevado al hospital el viernes, cuando llegó a mi casa en ese estado”, le habría dicho a su representante legal.
El abogado que defiende a la pareja de Coronel Suárez, Claudio Lofvall, indicó en diálogo con Crónica que Heit le pidió que aclarara que no pertenece a una secta.“Soy cristiana, no pertenezco a ninguna secta”, le dijo a su letrado quien recordó una vez más cuál será su estrategia.“Pretendo que la fiscal tenga contacto con la víctima para conocer los delitos en los que se basará la acusación”, sostuvo. De allí, entonces, su especial interés en que se haga cargo de la investigación la fiscal María Marta Corrado, quien hasta el momento era reemplazada por la subrogante,Claudia Lorenzo.
Lofvall negó que “los hechos sean de la magnitud con la que se trata en los medios”. En ese sentido, especificó que si bien durante su cautiverio en la casa de Grand Bourg al 1880, Sonia Molina ingirió comida de perros, «en ningún momento la obligaron a comer excrementos de animales».
«En esta causa ya hay una condena social, hay un montón de cosas en la opinión pública, en los medios de comunicación, que no están en el expediente o por lo menos no están todavía en el expediente”, indicó el abogado.
Por otra parte, aseguró que “la pareja está muy unida” y que Olivera “no manifestó” ser pastor. En cuanto a ese punto, el abogado indicó en diálogo con este medio que la pareja no pertenecería a una secta, sino a una ONG que “cuenta con reconocimiento provincial y municipal” y que habría sido presentada por el propio Olivera. De acuerdo con lo indicado por el letrado, la ONG en cuestión se llamaría Visión XXI y el domicilio legal con el que figuraría sería precisamente el de la casa de la pareja, es decir, la vivienda de Grand Bourg donde Molina permaneció cautiva.
En paralelo, la pareja pertenecía al Centro Cristiano Amar es combatir que, entre otras actividades, ayudaba a niños discapacitados en Chaco. Este es, sin dudas, uno de los puntos más oscuros e imbricados de la investigación: determinar si las atrocidades que cometieron se encuadran o no en las actividades de una secta y si efectivamente ese grupo existía o no. Lo que sí está claro, es que Sonia llegó al hospital con evidentes signos de desnutrición y de maltratos físicos.
Lovfalla, en tanto,estimó que quien primero será citado a declarar por Corrado,incluso antes que Sonia Maldonado, será el intendente de Coronel Suárez, Ricardo Moccero, por la presunta contaminación de la escena en la que habría incurrido. En ese sentido, tal y como adelantamos en nuestra edición de ayer,el jefe comunal se presentaría a declarar de manera espontánea.