La Voz del Interior (Argentina), 16.04.2024

El pasado viernes recibió sentencia, en juicio abreviado, la causa por las actividades ilegales de la Fundación Dolto o Doxa, a cargo de su titular, el psicólogo Marcelo Eduardo Bazán (70), quien obtuvo el beneficio del encierro domiciliario por estar afectado por graves enfermedades, pese a recibir una condena de nueve años de prisión por numerosos delitos. Este juicio realizado en la Cámara 3ª del Crimen de Córdoba contó como acusador al fiscal subrogante Martín Berger, debido a que Marcelo Hidalgo está con uso de licencia. El expediente involucraba a dos de tres expedientes en contra de Bazán: fue hallado (y se declaró) responsable de cuatro casos de abusos sexuales a igual número de mujeres que eran pacientes de él.

Por ese tramo, también estaba acusada Paola Flavia Ré Aramburo (49), quien era la esposa del psicólogo al que se le quitó la matrícula profesional. Fue absuelta. A Bazán le adjudicaron ocho casos de tentativas de extorsión agravada, coacción y amenazas, en las que también fueron declarados responsables: Ricardo David Torres (46), Darío Sebastián Luna (42), Pablo Inacio (42), Paulo José Sebastián Panico (45), Mauricio Fernán Melone (43) y Miguel Ángel Libra (77). Este último es el padre de Nicolás Libra (46), quien también está acusado, pero se encuentra prófugo. Los casos de abuso sexual fueron instruidos por la fiscal Daniela Maluf, mientras que las extorsiones fueron elevadas a juicio por el fiscal de Alta Gracia, Diego Martín Fernández. Existe un tercer tramo que aún no está elevado a juicio –también a cargo de Maluf– y cuyo expediente no ingresó a este debate: la acusación es por “defraudación por circunvención de incapaces”, en la que comparten esa acusación Bazán, su expareja Ré Aramburo y Pablo Matías Inacio.

Respecto de esto último, se sostiene que los tres presuntamente engañaron a personas cuya salud mental estaba dañada para apoderarse de sus bienes. Uno de ellos –como víctima– sería el propio Nicolás Libra, también paciente de Bazán, dueño de una financiera próspera en el interior provincial y con numerosas propiedades.

La prisión domiciliaria que obtuvo Bazán se debe especialmente a razones de salud y de edad. De fuentes judiciales trascendió que el condenado padece cáncer y otras dolencias graves. Bajo ningún concepto puede abandonar el lugar de residencia fijado ante el tribunal, que lo controlará frecuentemente y dispuso que un fiador se ocupe de garantizar el cumplimiento de la medida de restricción. En la sentencia, a partir de la condena por abusos sexuales a Bazán, se ordena que el expsicólogo deberá someterse a exámenes de identificación genética para inscribir sus patrones biológicos en el Registro Nacional de Datos Genéticos, para luego ingresar en el listado de personas que incurren en delitos contra la integridad sexual.

Hay que recordar que, tras una suspensión preventiva de su matrícula a mediados de 2019 y una condena anterior, el Colegio de Psicólogos de la Provincia de Córdoba le retiró definitivamente su licencia para ejercer la profesión, a fines de 2021. La condena La parte resolutiva de la sentencia acordado por el fiscal y los defensores indica que Bazán recibe los nueve años de prisión por un cúmulo de figuras penales: “abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de estupefacientes continuado” y “coacción continuada”, en concurso real (primer hecho); “abuso sexual con acceso carnal agravado por el grave daño a la salud mental de la víctima” en concurso ideal con “abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de estupefacientes continuado” y “coacción continuada”, en concurso real (segundo hecho); “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la participación de dos personas” en concurso ideal con “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el uso de estupefacientes” y “coacción” (tercer hecho) ; “abuso sexual con acceso carnal continuado” y “amenazas” en concurso real (hecho 11), y “coacción calificada reiterada” (hechos cuarto, quinto, sexto, séptimo, octavo, noveno, décimo y decimosegundo).

Por todo esto, sin contar el juicio que le resta, recibió una pena de nueve años de prisión –con el beneficio del encierro en su casa– más la inhabilitación especial perpetua para ejercer la profesión de psicólogo. En la misma sentencia –dictada tras el acuerdo por los vocales Gustavo Ispani (presidente), Leandro Quijada y María de los Ángeles Palacio de Arato– se absolvió a Ré Aramburo, exesposa de Bazán, por el tercer hecho. Además, por coacción calificada recibieron tres años de prisión efectiva Inacio, Luna, Panico y Torres, estos dos últimos por varios hechos. No obstante, por el tiempo que ya transcurrieron en prisión, quedaron libres.

En cambio, por este mismo delito, Melone y Miguel Libra recibieron una condena de tres años de prisión en suspenso y también salieron en libertad. Respecto de Nicolás Libra, está prófugo y tiene la acusación pendiente.