La Tercera (Chile), 28.01.2020

“Se fija audiencia de formalización de la investigación en la presente causa para el día 19 de marzo de 2020”. Así parte la resolución del 7° Juzgado de Garantía de Santiago, despachada el lunes 20 de enero, con la cual se agendó la formalización que realizará la Fiscalía Centro Norte en contra de Humberto Baeza Fernández, conocido en el mundo de la música como Tito Fernández o “El Temucano“.

La solicitud que realizó la fiscal Mariela Cid el 15 de enero, señaló que los delitos que se le imputarán son “violación de mayor de 14 años” y “abuso sexual a mayor de 14 años”.

La fiscalía apuntó sus indagatorias hacia Fernández al menos desde septiembre de 2018. Ese mes, un reportaje publicado por La Tercera dio cuenta de una querella por los delitos de abuso sexual y violación, patrocinada por el Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género, en contra del cantautor. Esa acción judicial daba cuenta de la denuncia realizada por una exintegrante del Centro Integral de Estudios Metafísicos —un grupo que todas las semanas se reúne a compartir experiencias esotéricas y que era liderado por el cantante— y que acusaba presuntos abusos sexuales. Luego fue The Clinic que expuso el relato de varias víctimas que detallaron en qué consistían los abusos.

Según fuentes relacionadas a la causa, los hechos que presentará el Ministerio Público en la audiencia de marzo serán sobre tres víctimas, agrupados en tres hechos ocurridos entre 2010 y 2014. Los eventuales delitos, de acuerdo a lo que se ha podido reconstruir, ocurrieron en el segundo piso del edificio del Sindicato de Folcloristas y Guitarristas de Chile, ubicado en el centro de Santiago. Otros ilícitos se habrían cometido en una habitación de un motel de la misma comuna e incluso en su propio departamento.

Los presuntos delitos que habría realizado Fernández estaban relacionados a un ambiente esotérico. El cantante era una especie de “guía espiritual”, que ayudaba a varias mujeres a superar algunos de sus problemas. Con esa relación y en varias de las reuniones, “El Temucano” habría aprovechado para tocarle el cuerpo a sus “aprendices” y darles besos en la boca.

Fue así como paulatinamente fue construyendo una relación de dependencia, la cual luego derivó en subordinación.

La dinámica era parecida para las tres víctimas, de acuerdo a la investigación del Ministerio Público. Otro hecho que presentará la fiscalía apunta a que en dos de las tres mujeres, los eventuales delitos se realizaron bajo intimidación y con incapacidad para ofrecer resistencia. Todo, mientras Fernández hacía uso de un arma blanca. Quienes conocen del trabajo esotérico que hacía el cantante, comentan que a cada una de las mujeres que iba a sus sesiones le daba una daga. A algunas de ellas el objeto iba personalizado con su nombre.

Según habrían relatado las víctimas, Fernández las amenazaba poniendo esta daga en sus gargantas. Y luego les habría solicitado que debían tener relaciones sexuales durante siete días en un horario y lugar que él determinaba. Si las mujeres no cumplían con esta orden, les decía que esa desobediencia se debía pagar con duros castigos. Los ilicítos, que según la fiscalía cometió Fernández, incluyen abuso y violación.

Para que las advertencias de “El Temucano” fueran creíbles, algunas de las víctimas declararon que recibieron en sus casas objetos amenazantes. Cuando les llegaban no sabían de qué se trataba y luego se daban cuenta de que era una señal del cantante, para que cumplieran lo que él les decía.

Mientras el Ministerio Público afina los últimos detalles de su indagatoria, la causa ya acumula varias declaraciones e informes que demostrarían la verosimilitud de las denuncias. Sin embargo, “El Temucano” rechaza estas acusaciones. El martes dijo a La Cuarta que “nunca violé a nadie” y también se preguntó “¿cómo me van a poner una pena por algo que no hice?”.