El País (España), Blanca Cia, 7.05.1996

La magistrada Anna Grau archivó ayer, por segunda vez, la investigación abierta a raíz de una denuncia presentada contra dos médicos seguidores del método Hamer por la familia de Helena Lumbreras. La paciente, afectada de un cáncer, falleció el pasado mes de agosto en Barcelona y su marido presentó denuncia en el juzgado de guardia.La juez sostiene que la justicia no Puede «demonizar» el método Hamer si la comunidad médica no lo hace previamente. Según la juez, el derecho penal no puede pronunciarse sobre una materia cuando es la comunidad médica la primera que debe decidir sobre la homologación y difusión de nuevas prácticas en ella. Según la magistrada, si los médicos no «demonizan» los postulados hamerianos, no lo hará la jurisdicción penal.

La magistrada archivó el caso por primera vez apenas un mes después de haberse presentado la denuncia, sin una investigación a fondo, alegando que no existía norma médica que excluyera el método Hamer. Tanto la fiscalía como la familia denunciante presentaron un duro recurso contra el auto de archivo, lo que provocó la reapertura de la investigación. El fiscal argumentó en el recurso que los dos facultativos podían haber incurrido con su actuación en los delitos de estafa, coacciones y negligencia profesional, y además en un delito contra la salud pública.

Después de tomar declaración a los dos facultativos y a los denunciantes, la magistrada resolvió ayer, por segunda vez, el archivo de las diligencias. Uno de los extremos que sostenía la familia de Helena Lumbreras era que los facultativos habían coaccionado a la enferma. La juez entiende que no se puede hablar de coacciones porque la paciente tenía la suficiente preparación intelectual para tomar la decisión de someterse a la disciplina del método Hamer. La terapia, según la denuncia, le provoco un terrible sufrimiento.

Ni coacciones ni estafa

Según la denuncia, la enferma renunció a proseguir el tratamiento de quimioterapia que recibía en el hospital Clínico por indicación de Vicente Herrera, uno de los médicos denunciados, quien negó haber coaccionado a la paciente o a su marido. El médico, al que el Colegio de Médicos de Barcelona le ha abierto un expediente, defiende el método Hamer no sólo como una «nueva medicina», sino también como una nueva forma de entender el mundo.En el segundo auto de archivo la juez argumenta también que no existe estafa porque entiende que los facultativos no prometieron a la enferma: que sanaría del proceso canceroso si se sometía al método Hamer. En su opinión, al no haber engaño no se puede hablar de estafa.

Fuentes de la familia denunciante precisaron ayer que todavía no tenían notificación del auto de archivo, aunque informaron de que recurrirán de nuevo el cierre de la investigación.