Obituario, La Vanguardia, 22.09.2010

Apodado Silo, el argentino Mario Luis Rodríguez Cobos fue el fundador del humanismo. Su actitud mesiánica y de gurú espiritual no contribuyó en absoluto –más bien al contrario– a lavar esa imagen sectaria. Rodríguez falleció el pasado día 16 por una insuficiencia renal en Chacras de Coria, localidad mendocina donde había nacido hacía 72 años. Silo rechazó someterse a un tratamiento de diálisis.

El Movimiento Humanista ha sido reiteradamente tachado de sectario tanto por expertos de distintos países como por ex miembros. Una estructura de captación y gestión piramidal de sus integrantes contribuyó a fomentar esa imagen. No obstante, los más de treinta partidos políticos humanistas que se reparten por el mundo –incluido el español– son perfectamente legales y alguno de ellos, como el chileno, goza de cierto respaldo popular.

Silo fundó el Movimiento Humanista el 4 de mayo de 1969. Ese día ascendió a Punta de Vacas, paraje de los Andes argentinos en la frontera con Chile. Allí, ante medio millar de seguidores, pronunció el discurso La curación del sufrimiento. Punta de Vacas es un lugar emblemático para el movimiento, pues en 1999 se conmemoró el trigésimo aniversario de aquella arenga. Los humanistas regresaron al pie del Aconcagua otros años por la misma fecha y el pasado 2 de enero culminó en ese paraje la Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia, otra iniciativa de Silo, tratado por muchos de maestro.

Su misticismo se manifestaba básicamente de modo pacifista y de izquierdas. Por eso, los partidos humanistas concurrieron frecuentemente a elecciones enmarcados en coaliciones progresistas, como es el caso de Chile, a cuyas presidenciales se presentó en el 2005 la formación local, aliada, entre otros, al Partido Comunista, bajo el nombre de Juntos Podemos. El candidato de la coalición fue el humanista Tomás Hirsch, el cuarto más votado. El PH de Argentina formó parte, a finales de los noventa, del progresista Frente Grande encabezado por Chacho Álvarez. Y en España, el PH participó en el 1986 en la fundación de Izquierda Unida.

ROBERT MUR