La Vanguardia (España), Clara Barjadí, 20.05.2024

Amadeo Llados. Difícilmente, un joven que tenga menos de 25 años no habrá oído ese nombre alguna vez. Este joven madrileño de 32 años se ha hecho viral en las redes sociales por presumir de un estilo de vida de éxito y lujos, y por un lenguaje que se ha convertido en su sello de identidad con palabras como mileurista, panza y fucking.

El discurso de Llados es simple, directo y golpea mucho entre los adolescentes. Tilda de fracasados aquellos que se levantan a las 9 lo más tarde, de inconformistas a los que no aspiran a tener tres Lamborghinis aparcados en el garaje, de pobres a aquellos que no tienen un sueldo que ronde los 1.000 euros y de ilusos a aquellos que dedican horas a los estudios. Vende su propia historia como una vida de superaciones, asegura que se ha convertido en millonario después de años trabajando como obrero y lavando platos. Un relato que no concuerda con la realidad, ya que ya se ha destapado que viene de una familia rica.

Todo lo que vende y promete Llados en sus redes sociales ha generado mucha controversia: desde la admiración absoluta hasta los avisos de que se trata de una secta. ¿Quién es realmente Amadeo Llados y qué está detrás de su mensaje? El psicólogo clínico Miguel Perlado, especializado en la ayuda a personas involucradas en sectas y dinámicas de relaciones abusivas, explica en RAC1.cat qué se esconde detrás de la marca Llados y los peligros de lo que ya se ha convertido en todo un fenómeno .

¿Quién es y cómo se construye el personaje?

Perlado describe el fenómeno de influencers como Llados como “un síntoma bastante característico de nuestros tiempos”. Son “personajes que se autoproclaman personas exitosas a todos los niveles y que promueven cursos, talleres y charlas motivacionales en torno al producto o servicios que ofrecen de tal modo”. ¿Y por qué estas personas se construyen un personaje?

El psicoterapeuta señala que “son personas que han vivido diversas frustraciones en su vida y lo llevan bastante mal”. Por eso, “estas frustraciones radicales” les generan la necesidad de dar un giro total a su vida y a su discurso, presentándose ante los demás como “personas de éxito”. La puesta en escena de este discurso, además, es aún más llamativa para el público de Llados, que es básicamente chicos adolescentes que tienen acceso a las plataformas digitales.

Perlado los describe como una “excrecencia del sistema”. Teniendo en cuenta que, “desde pequeños”, se hace un especial “énfasis en el éxito, en el rendimiento, en conseguir trabajos con dinero”, que se contrapone a la realidad actual en la que los jóvenes “se enfrentan a futuros cada vez más inciertos y difíciles laboralmente. Es en esta brecha donde ese tipo de personajes autoconstruidos y autorreferenciales se insertan, empaquetan sus ofertas y las disparan por todas partes”, detalla.

El personaje que “crean, ponen en marcha y viralizan es una construcción” , ha insistido Perlado, quien añade que existe “una preparación previa” y un convencimiento de “superioridad moral, espiritual e, incluso, física”. “Bajo ese convencimiento inyectan en los demás el anhelo de convertirse en ellos para poder alcanzar el éxito”, ha remarcado el psicólogo.

Estos influencers prometen el éxito, el cual no sólo pasa por “la obtención de dinero”. El curso de Llados es ‘Tu1millón’, pero su discurso también asegura que, gracias a él, “lograrás una transformación absoluta”. En la realidad, es una estafa piramidal. Es lo que se conoce como marketing de afiliación.

“Hay una explotación de quienes forman parte de la base y solo unos pocos, los que están arriba, son los que acaban teniendo beneficio económico y, sobre todo, control y poder sobre los demás”. No es una estafa cualquiera porque “juega con las emociones y la visión que tienes de ti mismo, del mundo y de lo que quieres por tu futuro”.

¿Por qué su mensaje tiene tanto impacto entre los adolescentes?

Los personajes autoconstruidos se basan en una “historia de vida que es casi una vida heroica”, señala Perlado. Ahora bien, “cuando la miramos de cerca, tiene poco heroico y mucha frustración acumulada ”. El experto añade que proyecta una imagen que “sigue porque hay una puesta en escena, un carisma, una forma de hablar y dirigirse a los demás que provoca un impacto”. Un relato que empiezan por creerse los propios influencers y que acaba convenciendo a su público.

“Muchos de los clientes o internautas pueden moverse en una primera línea de ‘me gustas’ y seguimiento. El problema es cuando empieza a generarse una devoción ciega” y cada vez, los seguidores, están “ansiosos de más contenidos y sin los que no pueden vivir”. Y eso no lo detiene el líder, sino que fomenta que la devoción vaya creciendo afirmando y reafirmando que “él es único e infalible y que cuenta con un método envidiable”.

¿Llados es el líder de una secta?

Perlado distingue entre tres figuras que se mueven por las plataformas digitales: los influencers (que pueden ser “nocivos”), el gurú del crecimiento personal (los cuales “organizan actividades que ponen en riesgo la salud de las personas”) y, por último, las sectas digitales (emergen como un grupo con “una casuística y una forma de funcionar” concretas). ¿En cuál de ellos podemos ubicar Amadeo Llados?

“Llados muestra un comportamiento sectario, a medio camino entre influencer tóxico y gurú del crecimiento personal y económico, con el mensaje salvífico centrado en la cuenta bancaria”, responde Perlado. El experto en sectas avisa que a menudo confundimos a estos “autoproclamados coachs motivacionales” y lo percibimos como “ha montado una secta” y que hay que ser “cuidadosos a la hora de describir una dinámica de relación o de grupo como de sectaria”.

Para que sea una secta “debe cumplir distintos indicadores y unas dinámicas estables a lo largo del tiempo y que se cumplen a la vez”. El psicólogo clínico confirma que existe “una narrativa y comportamiento sectario” que se caracteriza por “la tendencia hacia un discurso único”, con un vocabulario propio y frases que funcionan como eslóganes (fucking, mileurista, panza…); además de una carga emocional “muy fuerte que moviliza a las personas” y la estimulación del aislamiento del entorno más cercano.

Todos estos elementos son los que “van guiando a las personas” hacia un proceso de los que creen que saldrán con unos objetivos alcanzados y de los que creen que “controlan las consecuencias. Pero Perlado lo describe como ”una rueda de hámster“, en la que los seguidores cada vez persiguen la bola ”con más afán y frenesí».

Muchos de estos influencers tóxicos funcionan, mayoritariamente, por las redes sociales. Ahora bien, también llegan a organizar encuentros presenciales y aquí es donde también debe estar alerta. “Hay actividades donde los influencers generan un culto a la persona, pero eso no quiere decir que se acabe organizando una dinámica sectaria. El culto a la persona forma parte del engranaje sectario, pero es sólo un elemento y deberían concurrir otros”, explica el psicoterapeuta.

¿Cómo puede ayudar el entorno?

“Cuando uno entra en una dinámica de devoción que tiende a ir in crescendo o a ser excluyente y aislante, es importante que quienes están cerca abran todas las líneas de comunicación”, remarca Perlado. Lo importante es evitar la confrontación directa, “no deben ir corriendo a intentar demostrar que todo es un engaño y una estafa”, sino que deben “escuchar, atender e intentar detectar qué pasa por la mente de aquel joven , qué está pasando en su vida para que todo esto esté calando en él”.

El psicoterapeuta insiste en “no cuestionar frontalmente y de entrada” las convicciones del adolescente, y defiende “introducir algunos elementos de contraste desde el respeto, el diálogo y la paciencia”. Por último, recuerda que también puede ser muy útil dejarse “acompañar a un profesional preparado para este tipo de dinámicas”.

Perlado afirma que “salir de una relación sectaria o de una secta destructiva, sea digital o no, es un proceso complejo” y que existen diferentes maneras: desde que te expulsen, a abandonar porque han perdido todo el dinero o después ser víctimas de abusos físicos o sexuales o, incluso, porque ha habido una intervención policial que ha desestructurado el grupo. “Hay un choque brutal con la realidad” , dice, y es el momento en el que comienza “un trabajo sostenido” para hacer frente al trauma que ha provocado esa pertenencia y salida de una secta.