El Cierre Digital (España), Alejandro De Santiago, 6.04.2025
En sus años de existencia los Testigos de Jehová, «organización religiosa cristiana», han estado en el ojo de las polémicas sociales. El principal debate en todos estos años es si son una religión legítima.
Hasta la fecha, la confesión religiosa ha perdido casi todos los juicios que ha planteado a sus exmiembros. Un amplio grupo de extestigos de Jehová ha creado la ‘Operation Spotlight’.
Se trata de un movimiento -presente ya en 50 países- que busca que se investigue a los Testigos de Jehová. Desde esta organización se han enviado cartas a diversas personalidades políticas de EEUU. “Es necesario que se investigue a este grupo que tanto daño están haciendo en el mundo. Dividen familias, pueden provocan muertes al no aceptar transfusiones, y encubren presuntos casos de abuso sexual infantil”, señalan desde el movimiento.
Una de las creadoras de este movimiento es la testigo que está presente como víctima en un caso contra los Testigos de Jehová en Australia. Este caso consiste en el presunto encubrimiento de los Testigos de Jehová de más de 1.000 casos de abuso sexual prolongados durante 60 años.
Cabe recalcar que en países como Singapur, los Testigos de Jehová están prohibidos y considerados ilegales. Además, en 2017 Vladimir Putin hizo lo propio en Rusia. Elcierredigital.com ha podido contactar con Juan Antonio Paneque, embajador de la ‘Operation Spotlight’ en España.
Qué es ‘Operation Spotlight’
Concretamente, desde ‘Operation Spotlight’ se están enviando cartas al presidente Donald Trump y a los senadores de EEUU. El motivo es que “allí se encuentra la central de los Testigos de Jehová”, que es la Watchtower y está en Nueva York. “De nada sirve cortar un tentáculo del pulpo, lo más importante es la cabeza”, refiere metafóricamente Paneque.
Anecdóticamente, Paneque recuerda un hecho ocurrido en la sociedad Watchtower. “En 1926 Rutherford II, uno de sus presidentes, mandó construir un palacio, llamado Beth Sarim en San Diego (California). La intención era albergar la resurrección de Abraham, Moisés y Jacob, pero como no ocurrió se metió a vivir en el palacio”, relata Paneque.
Pese a que la ‘Operation’ comenzó hace escasos meses, los directivos ya están recibiendo respuesta de algunos senadores de EEUU. Paneque señala que “están mostrando interés en ayudarnos en manifestar la gran injusticia que se está haciendo, porque es que perdemos las familias”.
“Hemos decidido crear este movimiento ahora porque estábamos hartos y ahora tenemos a internet como medio de difusión. Nos permite comunicarnos con todos los países. Nuestra intención es dar a conocer todas las injusticias que hay dentro de los Testigos, que en este caso son dañinos”, continúa el embajador de la ‘Operation Spotlight’ en España.
Cuatro personas posan en un collage de fotos, dos hombres y dos mujeres, cada uno en un entorno diferente.
Fundadores de ‘Operation Spotlight’: Arriba Juan Antonio Paneque y Monica Kincaid, abajo Jimmy Brell y Shelly Brieaoux | Cedida
“Nuestro objetivo final no es la ilegalidad de los Testigos Jehová, sino que se adapten al tiempo social que corre. Es decir, que acabe el ostracismo, el encubrimiento de presuntos abusos y las muertes por creencia religiosa, en conclusión, que dejen de dañar a la humanidad y aflojen las medidas”, añade Paneque.
La carta a Donald Trump
Elcierredigital.com ha tenido acceso a la carta enviada desde ‘Operation Spotlight’ a Donald Trump. «La Watchtower Bible and Tract Society opera al frente de una red global que hace cumplir estrictamente las políticas antiseculares en todo el mundo. Algunas de estas políticas socavan la soberanía gubernamental al sustituir efectivamente el sistema judicial de un país por sus propios mecanismos internos”, se puede leer en la carta.
“En los casos de abuso sexual infantil (CSA), la organización de los testigos de Jehová crea, supervisa y hace cumplir normas que despojan a las víctimas de sus derechos. Estas políticas protegen a los abusadores, silencian a las víctimas y reemplazan los procesos legales con procedimientos judiciales internos que desafían las leyes de los Estados Unidos”, continúa la carta.
“Dada la gravedad, insto respetuosamente a su administración a iniciar una investigación federal formal sobre las políticas y prácticas de los Testigos de Jehová. Específicamente con respecto a los encubrimientos de CSA, la obstrucción de la justicia, el uso indebido del estado caritativo exento de impuestos, la supresión de los derechos de voto y las prácticas coercitivas de rechazo”, se añade en la carta.
También solicitan respetuosamente:
“1. El Departamento de Justicia investiga a los testigos de Jehová por encubrimiento de la CSA y obstrucción de la justicia.
2. El Internal Revenue Service revisa y revoca el estado de exención de impuestos 501 (c) (3) de la Watchtower si no cumple con los estándares de las organizaciones benéficas.
3. Autorizar al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) a evaluar el daño psicológico y social causado por las prácticas coercitivas de rechazo.
4. Una audiencia pública como las que se llevan a cabo en Australia y el Reino Unido”.
Relato de un extestigo de Jehová
Resulta relevante recoger la experiencia de Juan Antonio Paneque como Testigo de Jehová. “Llegue a ser superintendente viajante, uno de los cargos principales de los Testigos de Jehová. Sin embargo, decidí abandonarlos. También fui anciano y formé parte del comité”, explica.
“Mis padres, cuando yo dejé los Testigos, me dijeron, ojalá te hubieras muerto antes que dejar a los testigos. Ni ellos ni mi hermana me volvieron a hablar en toda mi vida”, relata Juan Antonio Paneque.
El embajador de ‘Operation Spotlight’ continúa narrando porque se salió de los Testigos de Jehová. “Empecé a ser consciente del ostracismo y los desengaños que había. El punto de inflexión fue un estudio que realice para hacer adepto a una persona homosexual”, señala.
“Vino un superintendente viajante y me dijo, tienes que dejar de hacer el estudio a este gay porque no da pasos para arrepentirse. No me quedó otra que obedecer porque en la escala jerárquica era mi superior. Cuando deje de hacer el estudio, la persona homosexual se suicidó”, explica Paneque.
Hoy día Paneque tiene una ahijada que tiene una bebé de solo dos años. “Cuando ella dejó los Testigos de Jehová sus padres dejaron de hablarle. De hecho, ni siquiera se han dignado a conocer a su nieta”, indica Paneque.
Algo de lo que se ha hablado mucho ha sido de los presuntos abusos sexuales supuestamente encubiertos por los Testigos de Jehová. Respecto a esto Paneque relata: “Vino una hermana y me dijo que otro hermano le había tocado los pechos y la vagina. Me tuve que ceñir a las normas y preguntarle si había testigos. Pero, ¿cómo una persona va hacer eso delante de testigos?, pues nada no me quedó otra que considerar que era una embustera”.
Para que un caso se haga efectivo las normas establecen que tiene que haber dos o más testigos. “La realidad es que al más mínimo indicio se debe llamar a la policía. Otro tema preocupante es el de la sangre. Hubo una señora que dejó morir a su marido, que no era testigo de Jehová, por no darle sangre”, observa Paneque.
“Cuando mi padre murió era anciano, rango superior, y cuando le enterraron había unas 400 personas. No hubo ni una que me dijese el pésame. Mis padres vendieron la casa y dejaron todo porque según los testigos llegaba el fin del mundo. Por cosas así, los extestigos estamos muy dañados, hemos perdido familias”, concluye el embajador de la ‘Operation Spotlight’ en España.
Elcierredigital.com ha tratado de contactar con los Testigos de Jehová para la elaboración de este artículo. Tras la publicación del reportaje, el abogado de la organización religiosa ha remitido un escrito que reproducimos ea continuación.
Aclaración de los Testigos de Jehová sobre la ‘Operation Spotlight’
Los Testigos de Jehová se han dirigido a elcierredigital.com tras la publicación de la noticia ‘Operation Spotlight’: Así se movilizan exadeptos contra los Testigos de Jehová el pasado 6 de abril. Desde nuestro diario ejercemos el derecho de rectificación que se encuentra previsto en la Ley Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, y de esta manera publicamos lo solicitado por el abogado David Baídez Seguí, representante legal de los Testigos de Jehová.
En el artículo se menciona que «llamar ‘secta’ a los Testigos de Jehová no vulnera el derecho al honor». Sin embargo, contrario a esta afirmación, la Audiencia Provincial de Madrid, Sección N°18, en su sentencia n.° 126/2025, de 20 de marzo de 2025, ha declarado expresamente que calificar a los testigos de Jehová como «secta destructiva», «extremista» o «peligrosa», constituye una intromisión ilegítima en el derecho al honor de dicha confesión religiosa.
En palabras del tribunal: «Las expresiones que refieren a la demandante como una secta peligrosa, extremista y destructiva[…]son desmesuradas y objetivamente injuriosas y vejatorias y, por tanto, suponen una intromisión ilegítima en el derecho al honor de la actora».
Además, Los testigos de Jehová son una religión cristiana de ámbito mundial, activa en España desde hace más de 100 años, reconocida oficialmente en el Ministerio de la Presidencia y con el estatus jurídico de «notorio arraigo».
La política de protección de menores que siguen los testigos de Jehová en todo el mundo está disponible al público en su página web www.jw.org. Los testigos de Jehová no protegen a nadie que sea culpable de abuso de menores de la acción de las autoridades y denuncian rápidamente a la policía las acusaciones de abusos a menores, respetando las leyes que existan en cada país al respecto.
Es sencillamente falso que los testigos de Jehová no hayan tomado medidas para asegurar que se denuncie cualquier alegación de abuso de menores ante las autoridades pertinentes. Durante décadas
Los testigos de Jehová han tomado medidas para garantizar que los fieles no se abstengan de denunciar una acusación de abuso sexual infantil a las autoridades legales por lealtad equivocada hacía el acusado o por miedo a dañar la reputación de la congregación.
Por último, también deseamos corregir las declaraciones erróneas sobre nuestras creencias acerca de la transfusión de sangre. Los 17 jueces de la Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos concluyeron por unanimidad en el caso Pindo Mulla c. España, de 17 de septiembre de 2024 (solicitud
N.° 15541/20), que «la demandante[testigo de Jehová]desea curarse de su enfermedad y está dispuesta a aceptar todos los tratamientos adecuados, a condición de que se niegue a recibir transfusiones de sangre.
Por lo tanto, este caso debe distinguirse de aquellos que implican el deseo de una persona de poner fin a su vida» (párr. 125), y que «es un principio cardinal en el ámbito de la atención de la salud que debe respetarse el derecho del paciente a dar o negar su consentimiento para el tratamiento» (párr.146).