La Vanguardia (Brasil), Andy Robinson, 7.10.2014
Toda fe en Basil tiene que ver con el sufrimiento .Pero llama la atención la diferencia entre el evangelismo actual que empieza a dejar su huella en la política , con diatribas homófobos de pastores diputados, y el culto afrobrasileño conocido como candomblé, una religión panteísta traída desde Africa por los 12 millones de esclavos que llegaron a Brasil entre el siglo XVI y el XIX.
El evangelismo en Brasil no fue una operación de contra insurgencia de la CIA como en Guatemala y otros países centroamericanos pero sus raíces están en EE.UU. Tele evangelistas estadounidenses con un proyecto ideológico estrechamente vinculado con el Pentágono, con las sedes de las grandes multinacionales y con Wall Street, como Billy Graham, lo exportaron a Brasil durante los años de la junta en los sesenta. (Más recientemente, el pastor evangélico Pat Robertson -otro fanático homófobo- instó a la CIA a asesinar a Hugo Chavez, algo que debe tenerse en cuenta cuando los evangélicos en Brasil advierten sobre una supuesta agenda oculta bolivariana en el gobierno de Dilma Rousseff.)
Ahora este fundamentalismo cristiano crece como la espuma mediante iglesias de grandes recursos económicos como la Igreja Universal do Reino de Deus que celebra multitudinarias sesiones de sicoterapia religiosa en su gigantesca macro iglesia Templo de Salamoa en el centro de Sao Paulo con capacidad para 45.000 personas. Yo asistí a uno titulado Terapia do amor, en la que cientos de parejas subieron al escenario para contar sus historias de salvación matrimonial, fidelidad recuperada, drogadicción superada..
En 1991 habia 13 millones de evangélicos en Brasil; ahora son 42 millones, el 22% de la población. Ahroa, en un ambiente de gran desencanto, 12 años después del primer e histórico gobierno de Lula y del Partido de los Trabajadores , el evangelismo crece a ritmo de vértigo en barrios marginados .“El PT ya no ofrece nuevos futuros; se está abonando el terreno para el auge de la extrema derecha; tanto la iglesia evangélica como los militares.”, me dijo Vladmir Safatle, filósofo de la Universidad de Sao Paulo. “Recuerda un poco al islamismo en el norte de Africa.”
Es una comunidad que los grandes partidos intentan seducir pese a que los valores ultra conservadoes del evangelismo en áreas como la sexualidad y el aborto no parecen muy compatibles con sus principios. Cuando el pastor evengélico ultra y homófobo , Silas Malafaia, advirtió que haría campaña contra Marina Silva si no retiraba el apoyo de su partido al matrimonio gay, Silva hizo exactamente lo que Malafaia quiso. Fue el inicio del fin para la coalición arco iris que la medioambientalista (ella misma evangélica ) intentó crear en su campaña presidencial.. Malafaia anuncia un programa Cura gay en su iglesia, Assembleia de Deus Vitória em Cristo.
El candomblé, a diferencia del tele evangelismo made in USA, es la raíz de la identidad afro brasileña. Dio lugar a la música samba, el carnaval y gran parte de la cocina bahiana que como comentamos aquí, tuvo una gran victoria contra las multinacionales del fast food durante el Mundial. El axá es una fuerza vital para gente que busca salidas de la opresión y la desesperanza, al igual que que el espíritu santo que los pastores traspasan a los “renacidos” de la iglesia evangelista. Pero el axé no discrimina ni moraliza respecto a la identidad y la sexualidad . “El candomblé acepta todo; homosexuales vienen a mis servicios; madres solteras; prostitutas; todo tiene que ver con la naturaleza”, dijo Mae Beata Iemanja, una sacerdote del candomblé (ver foto).
Pero ante el avance del evangelismo –una suerte de religión McDonalds – , el candomblé no tiene respuesta. Hay cada vez mas casos de agresiones por parte de grupos evangelistas que creen que los servicios de candomblé son obra del demonio “Los de candomblé tenemos verguenza de lo que hacemos y los evangélicos no tienen nada de vergüenza”,dijo Mae Beata que acaba de cumplir 84 años. “Nos llaman primitivos, satánicos y nadie responde”. La persecución del candomblé , no es ninguna novedad. “Los católicos nos perseguían también durante siglos”, dice.
Mientras habla, Mae Beata, se pone de pie y recita improvisando un verso del candomblé con gestos teatrales. “¡Yo soy negra!”, repite. “El candomblé era clave de al resistencia espiritual de los esclavos”, dice Clarisse Mantuano que está terminando una película –Encrucilhada das aguas– sobre la vida de Mae Beata, oriunda de Salvador de Bahia. Pero “la iglesia evangélica está acabando con todo”, dice. Los evangélicos hasta han intentado prohibir el carnaval de San Juan por sus aspectos afrobrasileño relacionados con el candomblé. Pero las grandes barriadas de marginados son el caldo cultivo del fundamentalismo cristiano pese a los programas anti pobreza del PT. “Los únicos que llegan a las comunidades pobres son los evangelistas y la policía”, dice Clarisse.
La cuestión para la izquierda brasileña es si podrá evitar que el evangelismo se convierta en un movimiento para los líderes de la nueva derecha que emerge en estos momentos, nostálgico por los años de junta militar y cada vez más parecida a sus homólogos en Venezuela o Miami en sus constantes referencias al peligro de una deriva bolivariana en Brasil. “La iglesia católica creó una corriente de izquierdas en America Latina; en lugar de despreciar el evangelismo desde una perspectiva elitista e intelectual , hay que intentar hacer lo mismo “,, dice Vladmir Safatle.
