Diagonales (Argentina), Alfredo Silletta, 30.05.2012
La Corte de Justicia de Catamarca hizo lugar al planteo que había realizado el fiscal de Cámara Jorge Silva Molina, para que una causa por abuso sexual contra Ricardo Javier Ocampo, conocido con el Maestro Amor, no prescriba, tal como lo había dicho antes la Cámara de Apelaciones de la misma provincia.
La decisión de la Corte significa que el anterior fallo de la Cámara será revisado y, si se falla en sentido contrario como se prevé, el Maestro Amor tiene grandes chances de volver a la cárcel de Catamarca mientras espere que se sustancie el juicio en su contra. Ocampo ya estuvo preso seis meses en 2009, en la cárcel de Miraflores, a poca distancia de la capital provincial, acusado del mismo delito.
El Maestro Amor había sido denunciado por varias jóvenes que estuvieron viviendo en el ashram que el gurú posee en Catamarca.
Historia. Ricardo Javier Ocampo, un riojano que hoy cuenta con 38 años, es señalado como el Sai Baba argentino. La historia oficial dice que nació a su vida carnal el 28 de junio de 1974 en la ciudad de La Rioja. Que emergió con tres pétalos de jazmín sobre el ombligo y una llaga en su costado, muestras claras que Dios se hacia carne en nuestro país.
Ese día espontáneamente los vecinos del lugar se reunieron para cantarle al niño coplas folklóricas y danzaron con alegría. A los seis años comenzó a ‘materializar’ lápices y frutas que regalaba a otros niños y a curar enfermedades. A los 13 años, como sus padres no comprendían que pertenecía a otro mundo, se fue de su casa. Durante los años de la adolescencia -como Jesús- nadie supo de él hasta reaparecer a los 22 años con el nombre de Maestro Amor o Ananda Baba. Hoy, además de tener su propio ashram en Catamarca, tiene seguidores por todo el país, Paraguay, Brasil, España e Italia.
En su cartas a los discípulos, el Maestro Amor dice:
“Las enseñanzas que ofrezco son tan ilimitadas como la fuerza que me mueve a escribirlas para cada uno de ustedes. Los ojos son la ventana del espíritu. Sin embargo, los ojos son la parte no tan física de los ojos mismos. Sabrán que dejar de ver es imposible, ya que los ojos son por naturaleza espontáneos y se mueven de un lado a otro…
Sin sonrojarse dice:
“Yo Soy sapiencia pura, conocimiento siempre. Como siempre Soy el uno, sin segundo este conocimiento es auto-conocimiento de mí mismo siempre. Ser auto consciente en la Omnipresencia no es algo que le sea al ser humano dado, sino solo en Mi unidad con él, lo cual significa, que no se puede decir que somos dos. Si no solo uno. JESÚS, BABA, SHIRDI, KRISHNA, RAMA y otros no tan conocidos por algunos de ustedes, son expresiones de mí mismo. Como así cada uno de ellos no pueden decir que yo no soy ellos sin saber primero, que Yo y ellos somos uno. Esto lo digo de esta manera a causa de la mente de ustedes tan solo. Yo no paso de la potencia al acto. Esto no es posible. Mis actos son actos luminosos y por ende puros.”
Hoy, el Maestro Amor, más allá de su “sapiencia”, esta a punto de volver a la cárcel.