Javier Bruna. – Barcelona. El País,  01/11/1984

Se deben matizar las declaraciones hechas por el conseller Maciá Alavedra sobre los afectados de la secta CEIS que fueron objeto de un presunto tratamiento de reenderezamiento o desprogramación. Afirmaba que «los funcionarios de la Generalitat se limitaron, a petición de los familiares, y con aquiescencia de los propios afectados, a acompañarlos hasta Corbera de Llobregat». Pero no fue así. Ninguno de los siete aludidos fuimos a Corbera por propia voluntad, y en ningún momento pudimos dar nuestro consentimiento o expresar nuestro desagrado, ya que no se nos dio siquiera oportunidad para ello. Precisamente por eso, después de recuperar nuestra libertad, fuimos directamente a presentar siete denuncias ante el Juzgado de Instrucción número 5 de Barcelona, donde hay un sumario abierto por un presunto delito de secuestro, en el que se siguen investigando estos supuestos delitos.